En la pasada fiesta de SaM Valentín hemos conocido el nuevo Fetterati Dúplex. En la zona de Suanzes, muy cerca de donde estaba el mítico Darksabbat, está la recién inaugurada sede, en un edificio moderno y de fácil acceso.
Fetterati -el único local estable dedicado al BDSM / Fetish que queda en estos momentos en Madrid- ha cambiado el piso de Delicias por un espacio más pequeño pero bien adaptado tanto a fiestas como al uso por horas o noches completas.
El local consta de una sala principal, donde encontramos el potro, dos puntos de suspensión (uno de seis metros de altura), una gran jaula, gran variedad de juguetes y un cómodo sofá de piel; y en la planta superior, un espacio más pequeño que puede hacer las veces de dormitorio o de lugar de juegos. A esto se une el aseo, con ducha de hidromasaje, cocina, almacén, jardín privado, etc.
Los aportaciones a los eventos son las habituales y la atmósfera, muy cuidada, como es seña de identidad de la marca: decoración, música, climatización, proyecciones, canapés, bebidas, atenciones de los anfitriones… y un ambiente muy animado, amigable y morboso, con abundantes juegos. Buena música y los clásicos bailes caribeños a horas avanzadas que marcan el final de la velada.
Comentamos con Andrea las novedades de la nueva etapa:
El equipo se ha ampliado ahora a un grupo de amigos: ¿cómo ha surgido este cambio y qué aportan los nuevos integrantes? Supongo que ser varios tiene ventajas pero también inconvenientes…
A lo largo de estos años hemos ido creando un grupo consolidado de amigos que son parte de la esencia de Fetterati. Esto nos permite, no sólo realizar las fiestas habituales que aparecen en nuestra web sino, otros muchos eventos de carácter, si cabe, aún más privado, que nos permiten disfrutar de nuestra idea del BDSM.
Cabe destacar que Fetterati es un espacio privado y sin ánimo de lucro que, a la vez, da la bienvenida a quien desee conocernos. El hecho de que ahora seamos un grupo de perversos los que estamos detrás del proyecto, hace que podamos disfrutar aún más de nuestro espacio.
¿Tenéis alguna forma de organización como grupo? Me refiero a reuniones, reparto de tareas… ¿Hay previsto ampliar los participantes mediante algún tipo de mecanismo o se trata más bien de una relación de amistad?
Simplemente somos amigos que compartimos unos ideales y un espacio. Lo demás viene rodado. En principio no está previsto aumentar el número de participantes pero tampoco los descartamos.
El nuevo espacio es muy agradable, si bien algo más pequeño que el anterior; ¿ha habido que hacer aquí también ‘recortes’?
Si bien disfrutamos enormemente de nuestro antiguo espacio en Batalla de Belchite 3, llegamos a la conclusión de que no era el sitio adecuado para nuestra idea de espacio: acceso sin ascensor, difícil aparcamiento, incómoda climatización y un largo etcétera. Afortunadamente aprendimos de nuestros errores y buscamos un espacio mucho más adecuado a nuestra idea.
Hemos recortado algo en metros cuadrados pero hemos podido trasladar todo el mobiliario a la nueva ubicación y añadir más, donde al ser un edificio moderno todo se ve más homogéneo. Han sido todo ventajas y hemos ganado en otros muchos aspectos.
¿Qué más actividades tiene o va a tener el espacio además de las fiestas?
En términos generales, en Fetterati se puede disfrutar de dos tipos de eventos. Los semiprivados que ponemos en nuestra web y los absolutamente privados que sólo están abiertos nuestros asiduos visitantes. Por tanto, organizamos todo tipo de eventos, desde fiestas a reuniones, pasando por exposiciones, cenas, comidas, cineclub, etc…
El espacio es muy adecuado para el uso privado, ¿Cómo funciona este aspecto? ¿Es una parte importante del proyecto?
Simplemente se trata de contactar con nosotros. Teniendo en cuenta que es un proyecto sin ánimo de lucro, las reservas privadas son importantes pero no esenciales.
Desde vuestra veteranía como promotores de eventos y gestores de locales, ¿cómo véis en estos momentos la escena bedesemera madrileña?
Da la sensación de que está empezando a despegar, a juzgar por los eventos que se organizan pero, queda un largo camino por recorrer.
¿Cómo definiríais la personalidad de Fetterati como proyecto y a qué se debe su larga duración?
La esencia de Fetterati viene de intentar reproducir en nuestro país lo que hemos vivido fuera de él y fusionarlo con las buenas cosas que también tenemos aquí. Buscamos exquisitez, elegancia, sofisticación. En definitiva, nos mueve mucho más la calidad que la cantidad ya que es un proyecto sin ánimo de lucro que tiene como único objetivo disfrutar del espacio en compañía de nuestros amigos y los amigos de nuestros amigos.
Creemos que si somos fieles a nuestros ideales sin dejarnos llevar por pasajeras pasiones, conseguiremos que crezca esa semilla que plantamos cuando Fetterati nació, hace ya muchos años en Barcelona.
Por último, nos gustaría recalcar que nos fascina conocer gente afín y que si aún no habéis tenido la oportunidad visitarnos, será un placer daros la bienvenida.
Agradecemos a Andrea y al resto del equipo de Fetterati su amabilidad y buen hacer; y damos la bienvenida al nuevo espacio de este veterano proyecto.
Eso de la esquisitez, elegancia y sofisticación, en España es la excepción que confirma la regla…
Un lugar deliciosamente elegante, donde poder dar rienda suelta a las fantasísa más perversas que se tengan.