La escena BDSM madrileña está a punto de perder otro lugar de referencia: el local que ha sido hasta ahora sede del Laboratorio de Fantasmas. A pesar de la corriente de aceptación social y de la greymania, parece que la ciudad es incapaz de sostener espacios dedicados al BDSM de manera estable. La causa hay que buscarla en el elevado coste de los locales, unido a la asistencia más que modesta de la gente a los eventos públicos.
El local de El Laboratorio ha ofrecido durante este tiempo un buen puñado de fiestas bdsm/fetish, pero también otras muchas actividades como exposiciones, sesiones de cine, eventos de moda, talleres de bondage, sesiones de foto… El concepto era gestionar un espacio abierto a todo tipo de corrientes creativas y en el que todos pudieran sentirse cómodos y con la libertad de expresarse.
Su talón de aquiles… el de siempre: la sostenibilidad económica. Luego, una etapa en la que ciertas inversiones parecían hacer posible la continuidad del espacio, con reformas, mejoras en las instalaciones…; esperanza que al final se frustró por la falta de cohesión en el equipo y por la imposibilidad de rentabilizar un local de esas dimensiones.
Pero el Laboratorio, como tal, seguirá en marcha, reinventándose una vez más para mantener su presencia dinamizadora en el mundillo bedesemero. Akhesa y Ponce reorganizan sus fuerzas y dan forma a diversos proyectos, desde la organización de eventos hasta trabajos de vídeo, radio o fotografía.
José María Ponce nos cuenta cuál es su balance de esta época que termina:
Resultaría una incongruencia recurrir a rollos del tipo «la experiencia ha sido muy positiva». Es obvio que hemos aprendido cosas, pero no es menos cierto que tenemos que considerar la experiencia como la historia de un fracaso.
Probablemente no supimos tocar las teclas adecuadas, quizás nos equivocamos en la apreciación de una realidad mucho más modesta de lo que imaginábamos. Lo cierto es que ese espacio abierto a todo lo alternativo que nos imaginábamos Akhesa y yo ha chocado con la cruda realidad.
Y en el estricto ámbito del bdsm tenemos que considerar una crisis económica que se ha convertido en algo más que en una palabra, exceso de eventos para un público limitado en número y, probablemente, cierta atomización del «mundillo» en pequeños grupos, no siempre afines entre sí.
Y la suma de todo ello hicieron inviable nuestro proyecto. Definitivamente, esto no es Berlín.
¿Qué podemos esperar de LDF en el futuro?
Mientras Akhesa y yo sigamos juntos, la marca LDF seguirá viva. De eso no hay duda. Es probable que tengamos que enfocar las cosas desde otra perspectiva. Vamos a volver a organizar las «Erotic Soirée». El mes que viene comenzaremos nuestras proyecciones/reuniones en Artistic Metropol, una nueva sala de cine, original y alternativa. Preparamos un programa de radio (muy pronto en antena), seguimos haciendo fotos y vídeos y continuaremos organizando fiestas y eventos en diferentes locales de Madrid.
Y, en breve, dispondremos de un nuevo espacio más íntimo, personal y exclusivo.
No, nos hemos rendido.
Nuestros mejores deseos a Akhesa y Ponce para sus nuevos proyectos.

Por nuestra parte, recordando los cierres de DarkSabbat (2009), Almazen_ds (2010), Luna Negra (2011) y El Baco (2012), recuperamos estas notas aparecidas hace un par de años sobre el tema de los locales bedesemeros:
- Los locales exclusivamente dedicados al bdsm tienen grandes dificultades para subsistir. Los costes de la infraestructura y del personal son elevados y habría que tener buenas entradas a diario o al menos de jueves a sábado para garantizar su funcionamiento. Sin embargo, parece que la demanda -al menos en Madrid- no da para tanto.
- Los locales con el modelo bar de copas afrontan también grandes problemas. El plan de ir simplemente a tomar una copa no arrastra al publico como pueda hacerlo una fiesta, por ejemplo. Por lo tanto la tendencia es que esos locales queden como opción para cuando no existe un plan más atractivo y pueden registrar entradas más bien modestas.
- Ha ganado un puesto central la figura del promotor o creador de eventos. Las fiestas, charlas, talleres… son cada vez más independientes del local, ya que es el promotor quien da el carácter y el estilo específicos al acto, el cual tiene una denominación de marca y un atractivo propio. La ubicación física puede variar sin problemas según las circunstancias, la disponibilidad o características de las salas…
- El motor principal de la escena bdsm hoy por hoy es la fiesta, entendida como producto completo. Es decir el creador del evento no se limita a abrir las puertas del local en la fecha prevista, sino que previamente diseña el concepto de la fiesta, el nombre, el estilo, el cartel, la música, las proyecciones o performances; los juegos, sorteos o similares; el vestuario exigido… Y luego actúa como relaciones públicas cuidando el ambiente y la fluidez de las interacciones en todo momento, invita a la participación con el ejemplo, etc.
- La fiesta así entendida circula de manera óptima por internet y las redes sociales. El nombre, la descripción del concepto y la ilustración o cartel se prestan a elaborar posts en webs o blogs y a transformarse en eventos en las redes sociales. Como cada fiesta es distinta se crea la sorpresa o novedad que puede movilizar al público; mientras que el nombre del promotor da garantías sobre la calidad del producto.
La conclusión: mientras no nos impliquemos más participativamente en la escena, estamos condenados a carecer de centros de reunión específicos (salvo honrosas excepciones), y a que la actividad se centre en eventos puntuales (fiestas de Dómina Libertad o LDF, Devotion, BiboBdsm, Discolatex, Queens, etc.), convocados en locales no directamente relacionados con el mundillo. Principalmente en Madrid esta tendencia parece clara.
Hace años le sugerí a una amiga la posibilidad de un Restaurante con decoración y platos con nombres bedesemeros, que podría tener éxito, ahora que se ha puesto de moda, y que podría servir de fuente de financiación y de círculo público de captación de gente interesada para fiestas más íntimas, cuando cerrase el restaurante, en la trastienda. Aparte, podrían organizarse cenas bdsm de rol y otro tipo de celebraciones. Lo dejo ahí como idea ;-)
Me parece una buena idea, si bien el problema de la rentabilidad está siempre presente…
Nuestro agradecimiento a José María Ponce Berenguer por sus declaraciones y recordar que la actividad de LDF como organizadores de eventos sigue en marcha: http://www.flechazosbdsm.com/fiestas-eventos-bdsm/view_entry.php?id=114&date=20130315
El centro de reunión específico es Facebook y Fetlife :-)
De acuerdo, sin duda; aunque ahí me refería a espacios 'físicos'.